Frase de la semana

Las 2 personas más ricas del mundo poseen una fortuna superior al PIB combinado de los 45 países más pobres. 
(N.G.)

dissabte, 19 de gener del 2008

Turismo blanco.


Estos días llega a su punto álgido la temporada de esquí. Personalmente creo que de las pocas cosas buenas que va aportar el cambio climático, es que acabará con las estaciones de esquí. Puede sonar un poco impactante, pero es lo que pienso y me explicaré.

 

De las muchas modalidades de turismo que existen, la actividad del esquí y todo el negocio y infraestructura asociada, es de las que mayor impacto genera y menos beneficios aporta. Las pistas de esquí, aunque parezca que no, durante su construcción y mantenimiento generan importantes alteraciones irreversibles en el entorno.

 

A continuación desgranaré los principales impactos ambientales:

-       Paisaje: normalmente las estaciones de esquí se ubican en lugares de gran interés natural y paisajístico, muchas veces espacios protegidos (Parques naturales). Las cumbres son ecosistemas muy especiales, de gran biodiversidad y francamente de una gran belleza. La construcción de una estación de esquí, sobre todo la infraestructura asociada, supone una gran alteración del paisaje: viviendas, telesillas, ampliación de carreteras, línea eléctrica, etc. Es muy habitual, que la ladera que se considera mejor para esquiar este ocupada por un bosque, que se acaba talando sin ningún reparo.

 

-       Consumo de agua: la nieve natural es escasa y curiosamente no gusta a los esquiadores. Así que las estaciones optan por fabricarla. Malgastando litros y litros de agua. Los gestores de las estaciones se defienden alegando que esa agua con el deshielo volverá a los rios. Pero no piensan que el agua de un lago o un rio de montaña tiene su utilidad ecológica, y que extraerla conlleva un impacto notable. Ya que en invierno, en esas latitudes, escasean las lluvias, así que son pocas las reservas de que disponen los animales de la zona. Por no decir que incluso puede afectar al abastecimiento de la población local.

 

-       Compactación del suelo: los esquiadores, muy finos ellos, quieren la nieve en su punto. Así que por las noches, en las pistas se dedican pasar una compactadota, una especie de tanque con una pala, para endurecer y repartir la nieve artificial. Estás máquinas no solo aplastan la nieve, sino también el suelo que hay debajo. Con la consecuente alteración de su textura, lo que deriva en que después en primavera no puedan rebrotar algunas especies vegetales. Se ha demostrado que donde hay una pista de esquí, solo puede crecer determinadas hierbas. El suelo está tan compactado que no permite el enraizamiento de arbustos ni árboles.

 

-       Imapacto social: las estaciones de esquí se venden como un instrumento para dinamizar la economía de la zona, medio rural. Pero lo que en realidad sucede, es que la estación da trabajo a cuatro personas y enriquece al señorito de capital que esta en su despacho. Y la población local se queda con lo mejor: los atascos de tráfico, las avalanchas de gente, ruidos, etc.

 

Se pueden añadir otros impactos: incremento del consumo energético, proliferación de urbanizaciones, ruido, problemas de saneamiento, incremento de producción de residuos.

Todo ello para divertir a un determinado público. Porque el esquí, por mucho que digan, no esta al alcance de todos. Es un deporte elitista, como su primo el golf. Y sinceramente, no se que tiene de divertido ni de deporte deslizarse sobre la nieve. Además es una actividad de temporada, pero los impactos ambientales y los problemas perduran el resto del año.

 

Creo que es hora de reciclarse. El modelo esquí para dinamizar las zonas de alta montaña está caducado. Además, siempre salen los dueños de las estaciones llorando que ha sido una mala temporada y que pierden dinero. Pues si no les salen las cuantas que pleguen. Pues no, incluso piensan ampliar algunas pistas. Una incongruencia.

 

Hay que apostar, sin abusar, por otras formas de turismo, como el rural, o otras actividades como el senderismo, agricultura ecológica, ganadería extensiva, etc.

divendres, 11 de gener del 2008

Coche ecológico???




Últimamente en los medio de comunicación nos bombardean con publicidad de “coches ecológicos”. Todas las marcas tienen modelos “ecológicos” o “verdes”. Algunas como Opel o Renault, empiezan a cansar. Un profano en temas ambientales, si ve estos anuncios debe pensar: vaya si todos nos cambiamos de coche, dentro de poco no habrá contaminación.


Pues des de aquí quiero denunciar que todos estos anuncios son publicidad engañosa. Hacen un mal uso de la palabra “ecológico” y están engañando a los consumidores. Un coche. Solo por el mero hecho de existir, ya es un impacto ambiental. Los términos ecología o ecológico se refieren a la relación con los ecosistemas naturales. Es decir algo ecológico es aquello hecho con productos naturales, como los que podemos encontrar en el medio natural. La agricultura si que puede ser ecológica, pero un coche nunca. Para que un coche fuera ecológico tendría que estar hecho de madera y fécula de patata.


En todo caso, estos nuevos coches que incluyen piezas recicladas y reducen emisiones, deberían anunciarse como vehículos que minimizan sus impactos en el entorno, o concebidos con criterios sostenibles. Pero llamarlos ecológicos es confundir y engañar al personal. Y creo que estos actos están tipificados como delito: publicidad engañosa. El coche ecológico ni existe ni existirá.


La verdad es que los medios de comunicación son unas herramientas muy útiles para difundir las problemáticas ambientales y concienciar a la población. Pero se corre el riesgo de que frivolicen sobre el tema y confundan a la población. Pasó con el término sostenibilidad. Lo machacaron tanto en televisión, incluso Buenafuente hizo un monólogo sobre esto, que se desprestigió la palabra y su significado. Ahora empieza a pasar lo mismo con el cambio climático. La tele lo esta mareando tanto, que lo acabará envolviendo en un manto de frivolidad, y la gente acabará por no darle importancia.


Aprovecho para aplaudir, solo un poco, el nuevo sistema de tarifación del impuesto de matriculación en función de la contaminación. Es una buena medida, pero llega tarde y es insuficiente. El problema de los vehículos a motor hay que atacarlo de raíz: el fabricante. Seria tan fácil como decir: todo vehículo nuevo que emita más de 80 o 100 gramos de CO2 por kilómetro, no puede salir de la fábrica. Y los todoterrenos deberían declararse maquinaria especial, como la agrícola, y que solo la pudieran comprar profesionales para uso profesional (policías, empleados de obras, guardabosques, etc). Pero usar un todoterreno para fardar por ciudad, debería ser delito.


Pero mientras haya petróleo, y sea rentable, nadie se atreverá con el sector del automóvil. Solo la UE empieza a endurecer las normativas de homologación, pero creo que se podría ser mucho más estricto.

dissabte, 5 de gener del 2008

Catalunya té set.




L’any 2007 ha estat un dels anys més secs dels últims 50 anys. Les pluges de tardor, molt importants en el clima mediterrani, han estat molt minses. Si a més afegim un estiu sec, obtenim uns alarmants valors de reserva d’aigua. Els embassaments i aqüífers de totes les conques catalanes estan en nombres vermells. I la situació no pinta gaire bé pels propers mesos.


Des de fa molt de temps, els experts apunten que el pitjor problema ambiental que patirà la humanitat en un futur, no gaire llunyà, serà l’abastament d’aigua potable. La quantitat d’aigua dolça del planeta és finita, així que tota la que es contamina o malgasta es perd. A més cada cop som més gent al planeta. Això només pot donar problemes. Estem acostumats a que el problema de l’aigua només afecta als països pobres. Això comença a canviar, ja que països avançats com el nostre, pateix crisis hídrica. L’aigua és escassa, imprescindible i no té substitut. Només la necessitem per viure, sinó també esta present, en major o menor mesura, en tots el processos industrials, i és imprescindible pel cultiu dels nostres aliments. Podrem adaptar-nos a un canvi en el clima, podrem viure sense petroli, però sense aigua no duraríem gaire. I no podem oblidar que no estem sols al planeta, tots els essers vius necessiten aigua per viure.


Des de sempre, a casa nostra la gestió de l’aigua s’ha basat en una premissa: garantir l’abastament. Això suposa fer el calgués (embassaments, transvasaments, etc...) per garantir l’aigua a la població. Sense pensar que un embassament no serveix de res, sinó plou lo suficient per omplir-lo. En actualitat ha canviat, però poca cosa. Hem passat de fer embassaments a fer dessaladores, minitransvasaments, comprar aigua a altres països, etc.. Solucions a curt termini i pregar perquè plogui.
La clau en la gestió de l’aigua es l’estalvi. S’ha de potenciar i garantir l’estalvi de l’aigua. Com deien el nostres avis: agua que no as de beber, dejala correr. El sector industrial sap la importància d’estalviar aigua, perquè s’hi juga el quartos. Per això ho ha fet des de sempre i d’una forma molt eficient. En canvi les barbaritats es fan als sectors agrícola i domèstic. Els agricultors no saben el que val l’aigua, perquè no la paguen. Per tant no els importa malgastar-la. Cal un canvi de visió al sector primari, i fomentar l’estalvi de l’aigua i aplicar mesures per evitar contaminar-la. I els usuaris domèstics, tots nosaltres, ens la cobren (i molt cara) però com la paguem ens creiem facultats per fer el que vulguem amb l’aigua. Aquí manca conscienciació.


L’administració en comptes de centrar-se en garantir l’aigua per a tothom, hauria de facilitar l’estalvi i garantir un bon ús. Per exemple: el nous pisos que incorporin els sistemes d’estalvi d’aigua, instal·lar la segregació d’aigües grises (aigua bruta per útil per al wàter) i aigües negres, fer un cens de les piscines (públiques i privades) i controlar les seves recàrregues, millorar el sistemes de control de fuites a les xarxes de distribució, etc.


Des de aquí vull fer una crida a que estalviem aigua. A casa, a la feina, a l’escola ... hem d’exigir que es tingui cura de l’aigua. Si veieu un mal ús denuncieu-lo! Per exemple si veieu una fuita al carrer, o que es rega un parc al mig dia en ple estiu, aviseu al vostre ajuntament o l’ACA (Agència Catalana de l’Aigua) . Si tots ho fem, ara amb un simple mail podem fer-ho, posarem en evidència a l’administració. Ella es la responsable de garantir l’aigua, per tan l’hem d’exigir en primer terme que l’estalviï i en faci un bon ús.


Recordeu, que l’aigua és un recurs escàs, no renovable, finit, fràgil però imprescindible.